Escalada de violencia: nuevas ofensivas entre Israel y Hamás
Aviones de combate israelíes bombardearon este sábado el centro de Gaza, matando en uno de los ataques a 10 miembros de una familia. De el otro lado, el movimiento islamista palestino Hamás lanzó múltiples cohetes contra Tel Aviv que dejó un fallecido. Entre medio de las hostilidades, llegó a la zona un enviado de Estados Unidos para iniciar negociaciones.
Las hostilidades empezaron bien temprano este sábado. Los tanques israelíes estacionados en la frontera dispararon nuevamente decenas de proyectiles de artillería contra tierras y hogares palestinos en el sur y el norte de la Franja de Gaza.
Al caer la noche, el ejército israelí lanzó una nueva docena bombardeos contra la franja, mientras que al menos tres rondas de lanzamientos de cohetes hicieron sonar las alarmas en el sur y el centro de Israel; obligando a muchas familias a correr a los refugios.
En Gaza, la cadena Al Jazeera informó que varios cuerpos sin vida llegaron a los hospitales. Según el Ministerio de Salud local, los muertos ascienden a 145 -entre ellos 41 niños- y más de 1.100 heridos.
Entre las víctimas se encuentra una familia de diez personas por el impacto de un proyectil que derribó un edificio en el campo de refugiados de Al Shati: ocho de los fallecidos eran niños, y el único superviviente es un bebé rescatado de los escombros.
En Israel, el vocero de la Cancillería israelí, Lior Haiat, informó en una conferencia de prensa con medios internacionales que esta semana 2.800 cohetes fueron lanzados contra el sur y el centro de Israel y 10 personas fallecieron, el último de ellos, un hombre de 58 años en una ciudad cercana a Tel Aviv.
Uno de los bombardeos israelíes contra Gaza que más sacudió este sábado al mundo, incluso a su aliado Estados Unidos, fue el que derrumbó un edificio de más de diez pisos, en el que se encontraban las oficinas de la televisión qatarí Al Jazeera y la agencia de noticias estadounidense Associated Press (AP).
“Estamos conmocionados y horrorizados por el hecho de que el ejército israelí apunte y destruya el edificio que alberga la oficina de AP y otros medios de comunicación en Gaza”, dijo el jefe de la agencia, Gary Pruitt.
“Conocen desde hace tiempo la ubicación de nuestra oficina y sabían que había periodistas en su interior. Nos avisaron que el edificio sería alcanzado” (por un misil), precisó.
Haiat defendió al ataque y sostuvo que Hamás tenía oficinas en esa torre: “Tenía oficinas de su inteligencia militar, de investigación y desarrollo donde sus principales expertos desarrollaban armas militares contra nosotros, y herramientas tecnológicas que Hamás usó contra nosotros para limitar nuestra actividad en Gaza”.
El ala militar de Hamás reivindicó el lanzamiento este sábado de múltiples cohetes contra Tel Aviv y varias zonas del centro de Israel en respuesta por la muerte de la familia palestina. Los ataques dejaron al menos un israelí fallecido.
El vocero del ejército israelí Jonathan Conricus informó que se trata de un hombre de 58 años que estaba dentro de su casa en la zona de Ramat Gan y falleció en el acto. Este ataque se suma a varios más que alcanzaron la zona metropolitana de Tel Aviv así como las inmediaciones del aeropuerto internacional de Ben Gurion.
Intervención
En medio de esta tensión, llegó a la zona el alto responsable del Departamento de Estado norteamericano para los asuntos israelíes y palestinos, Hady Amr.
El funcionario del Gobierno de Joe Biden tiene previsto reunirse este sábado con dirigentes israelíes en Jerusalén, antes de entrevistarse en Cisjordania con responsables palestinos.
El emisario quiere alentar a las dos partes a trabajar hacia una “calma duradera”, declaró la vocera adjunta del Departamento de Estado, Jalina Porter.
En la conferencia de prensa del Gobierno israelí, Conricus dejó hoy claro que “un alto al fuego no está en la mesa”.
“Nuestras instrucciones es que continuemos, aumentemos las operaciones y debilitemos las capacidades presentes y futuras de Hamás”, afirmó el vocero militar.
Estados Unidos ha sido criticado por no haber actuado para frenar la escalada de violencia, tras haber bloqueado ayer una reunión del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, informó la agencia de noticias AFP.
Este sábado, Biden habló tanto con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, como con el presidente palestino, Mahmud Abbas, la primera vez desde que asumió el mandatario estadounidense.
Según la Casa Blanca, Biden pidió que se garantice la seguridad de los medios extranjeros, tras lo cual, Netanyahu contestó: “Israel está haciendo todo lo posible para evitar cualquier daño a los que no están involucrados. La prueba es que los edificios que tienen locales de terroristas son evacuados de gente no involucrada antes de ser atacados” en el conflicto, informó un comunicado de su oficina.
Conricus informó hoy que ya sus fuerzas ya mataron a “73 combatientes enemigos” y atacaron a “gran parte del liderazgo militar de Hamás” y “682 objetivos militares” en la Franja de Gaza, a los que describió como “fábricas y depósitos de cohetes, túneles, casas que pertenecen a operativos militares que se utilizan para objetivos militares y combatientes enemigos”.
“Los que conocen Gaza saben que es humanamente imposible diferenciar a las estructuras civiles de las que usa Hamás para fines militares, es muy difícil para nosotros golpear solo objetivos militares pero estamos haciendo todos los esfuerzos posibles para para hacerlo. No tenemos interés ni queremos matar a civiles”, agregó el vocero militar.
En paralelo, las autoridades israelíes estuvieron en alerta todo el día también dentro de su país y en la ocupada Cisjordania por nuevas manifestaciones por la conmemoración del día de la Nakba, la “catástrofe” que representa para ellos la creación de Israel en 1948 y la expulsión de cientos de miles de palestinos que vivían en ese territorio y que desde entonces son reconocidos por la ONU como refugiados.
Por ahora, el saldo de la represión y los choques este sábado en Cisjordania es de un muerto, 78 palestinos heridos, entre ellos nueve con heridas de balas de plomo.
Las hostilidades son las más graves desde una gran ofensiva israelí contra Hamás en Gaza en 2014. Israel llevó a cabo otras dos ofensivas desde que el movimiento islamista tomó el control de esa región con costa al mar Mediterráneo donde viven 2 millones de personas.
Noticia en desarrollo