Crece la espiral de violencia entre Hamas e Israel

El nivel de beligerancia de los enfrentamientos entre Israel y Hamas va en aumento desde que las alarmas antiaéreas israelitas volvieron a sonar -tras siete años de silencio- a causa del ataque masivo con misiles desde Gaza perpetrado el lunes último por la organización yihadista e islámica palestina.

Pese a las condenas generalizadas, la mayor situación de beligerancia en la región desde 2014 no muestra indicios de ceder. Ayer, el secretario General de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, manifestó su disposición a retomar las consultas de los mediadores internacionales para la zona, el llamado “cuarteto de Madrid”, en el actual contexto de tensión extrema entre Palestina e Israel.

Los integrantes involucrados en el proceso de paz son la ONU, la Unión Europea, Estados Unidos y Rusia.

“Estamos dispuestos a reanudar el trabajo del cuarteto y contribuir al diálogo entre las partes del conflicto”, dijo Guterres en conferencia de prensa conjunta con el ministro de Exteriores ruso, Serguei Lavrov, en Moscú, informó la agencia AP.

En tanto, el Consejo de Seguridad de la ONU volvió a fracasar ayer en un acuerdo sobre el conflicto debido a la persistente oposición de Estados Unidos, principal aliado del estado hebreo, según diplomáticos.

Los disturbios entre judíos y musulmanes, en el marco de una fuerte represión, volvieron a estallar ayer en ciudades de Israel de mayoría palestina, en coincidencia con la ofensiva israelí contra Hamas en la Franja de Gaza.

La actual ola de violencia, al igual que otras anteriores, incluyendo las dos intifadas, o levantamientos palestinos -de 1987 y de 2000-, contra la ocupación israelí se vio alimentada por la disputa en torno a la soberanía de Jerusalén, uno de los asuntos más calientes del largo conflicto.

El fuego cruzado llegó luego de varios días de los peores enfrentamientos en Jerusalén entre palestinos y policías y colonos israelíes desde 2017, justo en coincidencia con el mes sagrado islámico de Ramadán.

Testigos cordobeses

“La situación en este país es complicada en extremo. El fanatismo religioso está llevando a toda la región al límite de un conflicto más grande”, lamentó Marcelo Sternberg, doctor en Biología oriundo de Córdoba que se desempeña como profesor en la Universidad de Tel Aviv (UTA), Israel, localizada en el barrio Ramat Aviv, al noroeste de la ciudad, de unos 900 mil habitantes.

Más allá de la caída de los misiles, lo que se ha puesto en juego es la convivencia entre árabes israelíes y judíos israelíes que cohabitan en ciudades mixtas donde, anoche, hordas de árabes salieron a prender fuego a sinagogas, autos y negocios de sus vecinos judíos”, comentó a La Voz el docente y jefe del Laboratorio de Ecología Vegetal en el Colegio de Ciencias Vegetales y Seguridad Alimentaria de la Facultad de Ciencias de la Vida de la UTA.

“Desde mi perspectiva, eso es lo más grave que ha sucedido y está sucediendo; la alimentación de este odio irracional extremo es, para mí, el verdadero éxito de Hamas”, razonó el cordobés, radicado en Israel desde hace tres décadas.

Sternberg es licenciado en Ciencias Biológicas por la Universidad Nacional de Córdoba (UNC). Continuó sus estudios de doctorado en la Universidad Hebrea de Jerusalén, Israel, y de posdoctorado, en el Imperial College de Inglaterra.

Es un ecólogo experimentado, dedicado al estudio del impacto global que las actividades humanas tienen sobre los ecosistemas terrestres.

“Lamentablemente esto va para largo. No se ve claro el devenir”, avizora el científico argentino.

“Trazar perspectivas a futuro en un contexto en el que la gente actúa de manera irracional no tiene demasiado sentido; es algo casi imposible”, consideró.

“Uno lamentablemente se va acostumbrando a esta situación, la va naturalizando, aunque jamás se pierden las esperanzas de que mejore algún día”, resumió sus impresiones el experto en biología.

“Al menos en este período corto, las cosas no marchan por buen camino. Veremos qué pasa más adelante, a medida que se vayan desarrollando los hechos”, advirtió Sternberg.

El reconocido biólogo argentino viene de recibir el premio Raíces, una de las distinciones más importantes que entrega el Gobierno argentino, a través del Ministerio de Ciencia y Tecnología y el Conicet, a científicos, a investigadores y a tecnólogos argentinos que trabajan en el exterior.

Las noches del goleador

Otro cordobés que está padeciendo la situación relacionada con el conflicto palestino-israelí es Eial Strahman (31), exjugador del Club Atlético Talleres.

Desde hace un año y medio, el futbolista argentino juega para el Hapoel Bik’at Ha Yarden, de Israel.

“Bueno, están sonando las sirenas en Tel Aviv por bombardeos. Tengo que correr al refugio en cuanto las escucho. Al refugio de mi edificio bajan dos hermanos de 20, 25 años y una pareja con un bebé. Se escuchan los bombazos afuera. Va a ser una noche larga”, posteó el delantero argentino en su cuenta de Twitter.