El papa Francisco cuestionó, una vez más, al presidente Javier Milei en una entrevista. Lo hizo cuando hablaba de las políticas de recortes, principalmente en educación, a los que calificó de “criminal” y como un “suicidio programado”.
Según el pontífice, esto pasa en los “países un poco dictatoriales, ya sea con dictaduras confesadas o dictaduras encubiertas”, lo mencionó en una entrevista con Canal Orbe 21.
El Papa también se refirió directamente a la Argentina y llamó a sus habitantes a “defenderse de las ideologías y no dejarse engañar”. En esa línea, defendió la doctrina social de la Iglesia y advirtió: “Hay posturas ideológicas que terminan engendrando monstruos”.
“El cristianismo no es una ideología, es una vivencia. Es una vivencia que va creciendo por el camino que Dios le da a cada uno. Los jóvenes que van a trabajar solidariamente comparten una vivencia que los va comprometiendo en la vida”, remarcó el pontífice.
En ese marco, el Papa dijo que los jóvenes que pertenecen a “organizaciones más ideológicas que cristianas” son “pequeños monstruitos aferrados a la idea”.
Cuestionamientos a Milei
En otro tramo de la entrevista, Bergoglio cuestionó directamente los programas económicos de ajuste en educación y cultura, tal como el que lleva adelante Javier Milei.
“Es un suicidio programado de un país. No se puede hacer ajuste en el desarrollo educativo de un país, es criminal”, recriminó.
Con esto, dijo que lo “alegra” cuando los jóvenes se oponen a este tipo de medidas: “Se dan cuenta y se oponen, arman lío, reclaman. Porque la educación es un alimento. Es lo mismo que quitarle la comida a la gente. Es la comida del alma, de la mente, del espíritu”.
“A veces, en los países un poco dictatoriales, ya sea con dictaduras confesadas o dictaduras encubiertas, la educación es una de las víctimas principales. O te la hacen ideológica para cambiar la cabeza, o te la van podando lentamente, en el caso liberal, ¿no?, y solamente los hijos de los ricos pueden tener un acceso educativo superior”, analizó el Papa.
Finalmente, Francisco dijo que en la Argentina “la historia de la educación es muy linda y siempre nuestro pueblo tuvo la percepción, el sentimiento, de que la educación es una de las cosas que no se tocan”.
“La universidad también es fundamental, porque el pueblo necesita formar cabeza con una cultura universitaria grande”, destacó y llamó a que los argentinos sigan “luchando” y “se defiendan de las ideologías”.
El papa Francisco cuestionó, una vez más, al presidente Javier Milei en una entrevista. Lo hizo cuando hablaba de las políticas de recortes, principalmente en educación, a los que calificó de “criminal” y como un “suicidio programado”.Según el pontífice, esto pasa en los “países un poco dictatoriales, ya sea con dictaduras confesadas o dictaduras encubiertas”, lo mencionó en una entrevista con Canal Orbe 21.El Papa también se refirió directamente a la Argentina y llamó a sus habitantes a “defenderse de las ideologías y no dejarse engañar”. En esa línea, defendió la doctrina social de la Iglesia y advirtió: “Hay posturas ideológicas que terminan engendrando monstruos”.“El cristianismo no es una ideología, es una vivencia. Es una vivencia que va creciendo por el camino que Dios le da a cada uno. Los jóvenes que van a trabajar solidariamente comparten una vivencia que los va comprometiendo en la vida”, remarcó el pontífice.En ese marco, el Papa dijo que los jóvenes que pertenecen a “organizaciones más ideológicas que cristianas” son “pequeños monstruitos aferrados a la idea”.Cuestionamientos a MileiEn otro tramo de la entrevista, Bergoglio cuestionó directamente los programas económicos de ajuste en educación y cultura, tal como el que lleva adelante Javier Milei.“Es un suicidio programado de un país. No se puede hacer ajuste en el desarrollo educativo de un país, es criminal”, recriminó.Con esto, dijo que lo “alegra” cuando los jóvenes se oponen a este tipo de medidas: “Se dan cuenta y se oponen, arman lío, reclaman. Porque la educación es un alimento. Es lo mismo que quitarle la comida a la gente. Es la comida del alma, de la mente, del espíritu”.“A veces, en los países un poco dictatoriales, ya sea con dictaduras confesadas o dictaduras encubiertas, la educación es una de las víctimas principales. O te la hacen ideológica para cambiar la cabeza, o te la van podando lentamente, en el caso liberal, ¿no?, y solamente los hijos de los ricos pueden tener un acceso educativo superior”, analizó el Papa.Finalmente, Francisco dijo que en la Argentina “la historia de la educación es muy linda y siempre nuestro pueblo tuvo la percepción, el sentimiento, de que la educación es una de las cosas que no se tocan”. “La universidad también es fundamental, porque el pueblo necesita formar cabeza con una cultura universitaria grande”, destacó y llamó a que los argentinos sigan “luchando” y “se defiendan de las ideologías”.La Voz