Dura derrota para el oficialismo y seis bancas para La Libertad Avanza en la Capital

Con el 99,4% de las mesas escrutadas, La Libertad Avanza se consagró como la fuerza más votada en Salta y propinó un golpe contundente al oficialismo provincial. No solo ganó en la ciudad capital, tradicional bastión peronista, sino que se quedó con seis de las 10 bancas en juego para diputados provinciales y se impuso también en la categoría de senadores.

La lista encabezada por Claudio Cansino logró el 34,10% de los votos, lo que equivale a 89.365 sufragios, y colocará a seis legisladores en la Cámara baja.

Lejos quedó el Frente Unidos por Salta, que representa al oficialismo del gobernador Gustavo Sáenz, con el 16,79% (43.994 votos) y apenas dos bancas.

El tercer espacio en disputa, el Frente Vamos Salta, obtuvo el 11,68% y también sumará dos bancas.

En la elección de senadores, el avance libertario se consolidó con Roque Cornejo Avellaneda, quien alcanzó el 35,04% de los votos y desplazó al oficialista Bernardo Biella (Alianza por la Unidad de los Salteños), que logró el 30,57%. Más

relegado quedó Guido Giacosa, del Frente Justicialista Salteño, con el 6,53%.

Los resultados marcaron un cambio de época en la política salteña. Por primera vez, el oficialismo ve amenazada su hegemonía en la Legislatura provincial, mientras que el espacio libertario, alineado con el presidente Javier Milei, parece haber capitalizado “el voto bronca” y se posiciona como actor central en la reconfiguración del poder local.

Según consigna El Tribuno, la magnitud de la derrota fue reconocida en off por fuentes cercanas al saencismo, aunque los principales referentes evitaron hacer declaraciones públicas durante la noche.

En contraste, desde La Libertad Avanza celebraron lo que definieron como una “revolución democrática” y prometieron impulsar “reformas profundas desde la Legislatura”.

En la ciudad de Salta, el golpe para el oficialismo fue particularmente duro. Allí, La Libertad Avanza arrasó con seis de las diez bancas en juego, confirmando su ascenso como primera minoría legislativa en el distrito clave de la provincia.

El mapa político salteño cambió de forma drástica. La Libertad Avanza no solo rompió con la tradición peronista de la capital, sino que demostró que su avance no es anecdótico: llegó para disputar poder real.

Con el 99,4% de las mesas escrutadas, La Libertad Avanza se consagró como la fuerza más votada en Salta y propinó un golpe contundente al oficialismo provincial. No solo ganó en la ciudad capital, tradicional bastión peronista, sino que se quedó con seis de las 10 bancas en juego para diputados provinciales y se impuso también en la categoría de senadores.La lista encabezada por Claudio Cansino logró el 34,10% de los votos, lo que equivale a 89.365 sufragios, y colocará a seis legisladores en la Cámara baja. Lejos quedó el Frente Unidos por Salta, que representa al oficialismo del gobernador Gustavo Sáenz, con el 16,79% (43.994 votos) y apenas dos bancas. El tercer espacio en disputa, el Frente Vamos Salta, obtuvo el 11,68% y también sumará dos bancas.En la elección de senadores, el avance libertario se consolidó con Roque Cornejo Avellaneda, quien alcanzó el 35,04% de los votos y desplazó al oficialista Bernardo Biella (Alianza por la Unidad de los Salteños), que logró el 30,57%. Más relegado quedó Guido Giacosa, del Frente Justicialista Salteño, con el 6,53%.Los resultados marcaron un cambio de época en la política salteña. Por primera vez, el oficialismo ve amenazada su hegemonía en la Legislatura provincial, mientras que el espacio libertario, alineado con el presidente Javier Milei, parece haber capitalizado “el voto bronca” y se posiciona como actor central en la reconfiguración del poder local.Según consigna El Tribuno, la magnitud de la derrota fue reconocida en off por fuentes cercanas al saencismo, aunque los principales referentes evitaron hacer declaraciones públicas durante la noche. En contraste, desde La Libertad Avanza celebraron lo que definieron como una “revolución democrática” y prometieron impulsar “reformas profundas desde la Legislatura”.En la ciudad de Salta, el golpe para el oficialismo fue particularmente duro. Allí, La Libertad Avanza arrasó con seis de las diez bancas en juego, confirmando su ascenso como primera minoría legislativa en el distrito clave de la provincia.El mapa político salteño cambió de forma drástica. La Libertad Avanza no solo rompió con la tradición peronista de la capital, sino que demostró que su avance no es anecdótico: llegó para disputar poder real.La Voz