Manejaba una camioneta, usaba el celular y causó una tragedia en Córdoba: lo mandaron a juicio
El conductor de una camioneta que, en mayo pasado, se cruzó de carril en la avenida de Circunvalación de Córdoba Capital y causó la muerte de una automovilista y heridas en otra persona, fue enviado a juicio en las últimas horas. Clever Alexis Rodríguez (27), quien permanece en libertad, deberá responder por supuesto homicidio culposo agravado y lesiones culposas agravadas.
Así lo dispuso el fiscal de instrucción Juan Pablo Klinger, quien entiende y concluyó que el joven perdió el dominio de la camioneta en la Circunvalación por ir utilizando su teléfono celular. El instructor se basó en complejos estudios técnicos por parte de la Policía Judicial.
La víctima fatal de esta historia fue Anabela Ayelén Vega (30), quien iba a bordo de un Fiat Uno rumbo al trabajo. Acababa de dejar a su hija en la casa de un familiar.
El abogado Carlos Nayi, quien representa al esposo de la víctima, expresó su satisfacción por la elevación a juicio y anticipó que, ya en audiencia, pedirá un agravamiento de la figura penal: quiere que todo se caratule como un homicidio simple por dolo eventual.
El homicidio culposo tiene una escala de entre 3 y 6 años de cárcel. El homicidio simple arranca desde los 8 y puede llegar a 25 años.
A todo esto, restará ver qué posición toma el asesor letrado Carlos Caeiro, quien defiende al acusado. Caeiro, a todo esto, se encuentra bajo la lupa en el marco de un sumario de la Justicia a raíz de la supuesta filtración de respuestas de exámenes en ese ámbito.
El drama vial ocurrió el 29 de mayo pasado alrededor de las 7.44 de la mañana.
Según la causa judicial, que instruyó el fiscal Klinger, Clever Alexis Rodríguez iba conduciendo una camioneta Toyota Hilux blanca, propiedad de la empresa Fep.Maq.Sa, por la avenida de Circunvalación Agustín Tosco de Córdoba.
Iba por el anillo externo en sentido este-oeste. De acuerdo a la fiscalía, manejaba a velocidad permitida y sin haber ingerido sustancias. Las condiciones de visibilidad eran óptimas.
Tras pasar el cruce con avenida La Voz del Interior, en el kilómetro 42, Rodríguez perdió el control de la camioneta.
Nadie lo tocó ni rozó.
Según la causa, en esas circunstancias, el conductor “inobservó los deberes de cuido impuestos” para manejar y “utilizó su teléfono celular para ingresar a la aplicación ‘reproductor de música´” y luego “para ver una historia/estado de la aplicación WhatsApp” correspondiente a un contacto suyo.
La reglamentación sólo permite el uso de celular mediante manos libres, según la Justicia.
De acuerdo al fiscal, esto motivó a que perdiera la debida atención “que el manejo del rodado exigía en todo momento de la circulación”.
Al sobrepasar a un camión por el carril rápido, antes del cruce con avenida Spilimbergo, dejó de tener el control efectivo de la camioneta, tocó la banquina, lo que lo llevó a realizar un cambio de dirección hacia su derecha con el objeto de retornar nuevamente a la carpeta asfáltica.
Ahí perdió el control, volvió a la banquina, atravesó el canal central y se cruzó al carril contrario. Debido a la velocidad a la que circulaba y la topografía del lugar, dio vuelcos y chocó contra el Fiat Uno, donde iba Anabela Ayelén Vega.
La mujer murió en el acto,
Tras la colisión, la camioneta realizó nuevamente vuelcos y giros e impactó contra un Chevrolet Ónix blanco, donde iba Lucas Andrés Alzapiedi, quien sobrevivió.
El conductor de la camioneta resultó con golpes menores.
Imputación y a juicio
Desde un primer momento, Rodríguez quedó por homicidio culposo agravado.
Esta figura gira en torno a la imprudencia, la temeridad.
Por orden de la fiscalía, se inició una compleja investigación que se basó en el cotejo de cámaras y peritajes de la Policía Judicial, como así también la búsqueda de testigos.
El día del siniestro, el fiscal sospechó algo y ordenó secuestrar el celular del conductor.
Fue remitido a peritajes de la Judicial. Así que los técnicos determinaron, siempre según la Justicia, que al momento que sucedió todo el conductor iba utilizando el celular. De acuerdo a fiscalía habría ido usando el WhatsApp y habría activado el reproductor de música mientras se iba a trabajar.
Al ser indagador, negó los hechos y se abstuvo de declarar. Luego, presentó un escrito con consideraciones que creyó convenientes.
El conductor de una camioneta que, en mayo pasado, se cruzó de carril en la avenida de Circunvalación de Córdoba Capital y causó la muerte de una automovilista y heridas en otra persona, fue enviado a juicio en las últimas horas. Clever Alexis Rodríguez (27), quien permanece en libertad, deberá responder por supuesto homicidio culposo agravado y lesiones culposas agravadas.
Así lo dispuso el fiscal de instrucción Juan Pablo Klinger, quien entiende y concluyó que el joven perdió el dominio de la camioneta en la Circunvalación por ir utilizando su teléfono celular. El instructor se basó en complejos estudios técnicos por parte de la Policía Judicial.
La víctima fatal de esta historia fue Anabela Ayelén Vega (30), quien iba a bordo de un Fiat Uno rumbo al trabajo. Acababa de dejar a su hija en la casa de un familiar.
El abogado Carlos Nayi, quien representa al esposo de la víctima, expresó su satisfacción por la elevación a juicio y anticipó que, ya en audiencia, pedirá un agravamiento de la figura penal: quiere que todo se caratule como un homicidio simple por dolo eventual.
El homicidio culposo tiene una escala de entre 3 y 6 años de cárcel. El homicidio simple arranca desde los 8 y puede llegar a 25 años.
A todo esto, restará ver qué posición toma el asesor letrado Carlos Caeiro, quien defiende al acusado. Caeiro, a todo esto, se encuentra bajo la lupa en el marco de un sumario de la Justicia a raíz de la supuesta filtración de respuestas de exámenes en ese ámbito.
El drama vial ocurrió el 29 de mayo pasado alrededor de las 7.44 de la mañana.
Según la causa judicial, que instruyó el fiscal Klinger, Clever Alexis Rodríguez iba conduciendo una camioneta Toyota Hilux blanca, propiedad de la empresa Fep.Maq.Sa, por la avenida de Circunvalación Agustín Tosco de Córdoba.
Iba por el anillo externo en sentido este-oeste. De acuerdo a la fiscalía, manejaba a velocidad permitida y sin haber ingerido sustancias. Las condiciones de visibilidad eran óptimas.
Tras pasar el cruce con avenida La Voz del Interior, en el kilómetro 42, Rodríguez perdió el control de la camioneta.
Nadie lo tocó ni rozó.
Según la causa, en esas circunstancias, el conductor “inobservó los deberes de cuido impuestos” para manejar y “utilizó su teléfono celular para ingresar a la aplicación ‘reproductor de música´” y luego “para ver una historia/estado de la aplicación WhatsApp” correspondiente a un contacto suyo.
La reglamentación sólo permite el uso de celular mediante manos libres, según la Justicia.
De acuerdo al fiscal, esto motivó a que perdiera la debida atención “que el manejo del rodado exigía en todo momento de la circulación”.
Al sobrepasar a un camión por el carril rápido, antes del cruce con avenida Spilimbergo, dejó de tener el control efectivo de la camioneta, tocó la banquina, lo que lo llevó a realizar un cambio de dirección hacia su derecha con el objeto de retornar nuevamente a la carpeta asfáltica.
Ahí perdió el control, volvió a la banquina, atravesó el canal central y se cruzó al carril contrario. Debido a la velocidad a la que circulaba y la topografía del lugar, dio vuelcos y chocó contra el Fiat Uno, donde iba Anabela Ayelén Vega.
La mujer murió en el acto,
Tras la colisión, la camioneta realizó nuevamente vuelcos y giros e impactó contra un Chevrolet Ónix blanco, donde iba Lucas Andrés Alzapiedi, quien sobrevivió.
El conductor de la camioneta resultó con golpes menores.
Imputación y a juicio
Desde un primer momento, Rodríguez quedó por homicidio culposo agravado.
Esta figura gira en torno a la imprudencia, la temeridad.
Por orden de la fiscalía, se inició una compleja investigación que se basó en el cotejo de cámaras y peritajes de la Policía Judicial, como así también la búsqueda de testigos.
El día del siniestro, el fiscal sospechó algo y ordenó secuestrar el celular del conductor.
Fue remitido a peritajes de la Judicial. Así que los técnicos determinaron, siempre según la Justicia, que al momento que sucedió todo el conductor iba utilizando el celular. De acuerdo a fiscalía habría ido usando el WhatsApp y habría activado el reproductor de música mientras se iba a trabajar.
Al ser indagador, negó los hechos y se abstuvo de declarar. Luego, presentó un escrito con consideraciones que creyó convenientes.La Voz
