La Justicia de EE.UU. ordenó sacar a Xiaomi de una “lista negra” heredada del gobierno de Trump
El fabricante chino de teléfonos Xiaomi debe ser retirado temporalmente de una lista negra de Estados Unidos, en la que fue incluido durante el Gobierno de Donald Trump en medio de la batalla comercial y diplomática con el gigante asiático, según lo ordenó en las últimas horas un fallo de un juez de Washington DC.
Los departamentos de Defensa y del Tesoro, que habían incluido a Xiaomi en la mencionada lista, “no demostraron que los intereses de seguridad nacional estuvieran en juego”, indica la resolución judicial citada por la agencia de noticias AFP.
Por tanto, debe eliminarse a la empresa de la lista, al menos temporalmente, al tiempo que se suspende la prohibición a los inversores estadounidenses de comprar acciones de la firma que deja de estar calificada como una “compañía militar comunista china”.
En su recurso interpuesto en enero contra su inclusión en la lista negra, Xiaomi afirma que esa decisión fue “incorrecta” y que se “privó a la empresa del debido proceso”.
Apenas seis días antes del fin del mandato de Trump el 20 de enero, su Gobierno hizo una serie de anuncios contra Xiaomi, así como contra la plataforma TikTok y el gigante petrolero CNOOC, todas empresas con base central en el gigante asiático.
Xiaomi, que superó a Apple al convertirse en el tercer fabricante de teléfonos celulares más grande del mundo en 2020, es una de las nueve empresas chinas que están en la lista negra y a la que el Gobierno de Trump acusó de tener vínculos con el ejército chino.
La decisión del juez se produce en momentos en que el regulador de telecomunicaciones de Estados Unidos (FCC) clasificó a cinco empresas chinas de telecomunicaciones, incluidas Huawei y ZTE, como una amenaza para la seguridad nacional.
“Esta lista es un gran paso hacia el restablecimiento de la confianza en nuestras redes de comunicaciones”, dijo la presidenta interina de la FCC, Jessica Rosenworcel.
“Garantizará que, a medida que se construyan redes de próxima generación en todo el país, no se repitan los errores del pasado ni se utilicen equipos o servicios que supongan una amenaza para la seguridad nacional estadounidense”, concluyó.