Rusia expulsó a corresponsal de la BBC, en plena tensión política con Reino Unido

Las autoridades de Rusia no renovaron el visado a la corresponsal de la radiotelevisión pública británica, BBC, como represalia a la supuesta “persecución” de la que estarían siendo víctimas los periodistas rusos en Reino Unido, en plena escalada de tensiones políticas entre los dos países.

La decisión del regulador británico de no conceder permisos a la cadena pública rusa y otras medidas de “presión” percibidas por Moscú estarían detrás de esta decisión, que afecta a la continuidad del trabajo de la corresponsal Sarah Rainsford.

La BBC condenó esta decisión e instó a las autoridades rusas a “reconsiderar la expulsión” de Rainsford. El director general de la BBC, Tim Davie, calificó la expulsión de “un ataque directo a la libertad de los medios de comunicación”.

“Sarah es una periodista excepcional y valiente. Habla ruso con fluidez y ofrece informes independientes y en profundidad sobre Rusia (…) Instamos a las autoridades rusas a reconsiderar su decisión, mientras tanto, continuaremos informando los eventos en la región de manera independiente e imparcial”, expresó Davie en un comunicado.

Asimismo, el Ministerio de Exteriores de Reino Unido tildó la medida como “otro paso injustificado de las autoridades rusas”.

Por su parte, la portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, Maria Zajarova, asegura que se ha explicado a la cadena “en detalle” los motivos del veto. Zajarova denunció en Telegram un “abuso de visados” por parte de Londres, así como “persecución de periodistas rusos”.

Rainsford, una de las dos corresponsales de la BBC en Moscú, deberá abandonar Rusia antes de que acabe el mes, lo que supone ‘de facto’ la primera expulsión de un periodista británico en una década. Recientemente, había preguntado al presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, si seguía siendo el líder legítimo de su país.