En cantidad de empresas, Córdoba perdió 2.544 firmas y el país retrocedió hasta 2007
A pesar de que la actividad económica registra algunos signos de recuperación desde el segundo semestre del año pasado, el cierre de empresas no se detiene.
Abril pasado, el último mes con información oficial al respecto, finalizó con 19.210 firmas menos que en febrero de 2020, llevando el número de empleadores, un total de 488.996, al menor nivel desde el año 2007.
El dato lo refleja un informe dado a conocer por el Instituto de Investigaciones Económicas (IIE) de la Bolsa de Comercio de Córdoba, según el cual continúan cerrándose pequeñas y medianas empresas, el segmento más golpeado por la pandemia.
Además, en el mismo mes de abril, había 133 mil empleos asalariados formales del sector privado menos que en febrero de 2020, y casi 211 mil menos que en enero de 2012. A partir de ese mes, la economía argentina dejó de crecer y comenzó un ciclo de estancamiento que duró hasta abril de 2018, cuando arrancó la recesión que se profundizó con la pandemia del virus Covid.
“En una economía con una insoportable carga impositiva al sector privado, un sector público ineficiente en la provisión de servicios y una inestabilidad macroeconómica ocasionada por un déficit fiscal crónico, sin financiamiento genuino, no es de extrañar el estancamiento en el que quedó atrapada la dinámica empresarial y la creación de empleo”, resalta el informe.
En Córdoba
Según el IIE, una característica de este ciclo en Córdoba es que impacta con más fuerza en las pymes. Entre febrero de 2020 y abril de 2021, hubo una pérdida neta de 2.544 empresas en la provincia, de las cuales la gran mayoría, 2.514 firmas, corresponden a unidades productivas de hasta 25 empleados.
En la provincia, a diferencia de lo que ocurre a nivel nacional, cuando se compara el empleo registrado de abril de este año con febrero del año pasado, se encuentra que el empleo total se ha recuperado levemente.
Pero el dato es que, en este período, se crearon 13.784 empleos en empresas de más de 100 empleados, mientras que en las firmas de hasta 25 trabajadores se perdieron 10.457 empleos.
Esta situación está vinculada a rubros que siguen muy afectados por las restricciones que genera la pandemia, como turismo, gastronomía y otros servicios.
Pero aún así, se dan casos de actividades como agricultura, comercio, industria, construcción, información y comunicaciones, enseñanza y la cadena automotriz, donde el empleo creció entre las grandes empresas, pero se redujo entre las pymes.
Según el IIE, esto modifica la configuración del mapa empresario en Córdoba, donde las grandes empresas, con mayor capacidad de soportar la crisis, aumentaron su participación en la creación de nuevos empleos.
Mientras que antes de la pandemia las empresas de más de 100 empleados representaban el 42 por ciento del empleo total registrado del sector privado, en abril de este año su participación había aumentado a 45 por ciento, en detrimento de una menor contribución de las empresas pequeñas.
A nivel nacional ocurre algo similar, ya que se perdieron casi 100 mil empleos y más de 19 mil empresas de menos de 100 empleados y se crearon 50 mil empleos en las empresas de mayor tamaño.
El problema es que en el país hay menos pymes que nacen comparadas con la cantidad que cierran. El fenómeno se profundiza ante medidas que se impulsan desde el oficialismo, como suspender por seis meses la creación de Sociedades por Acciones Simplificadas (SAS) e introducir requisitos que complican el proceso de creación de empresas.
“El gobierno nacional pareciera orientado a la ‘creación destructiva’, con muchas políticas, sin sustento técnico ni respaldadas en la evidencia, que están conduciendo a la destrucción de parte de nuestro aparato productivo”, resalta el informe.