Brasil: mientras sigue la tensión entre Bolsonaro y Guedes, caen los mercados
“Para convertirse en Argentina, (demora) seis meses; para convertirse en Venezuela, un año y medio”. La frase pertenece al ministro de economía de Brasil, Paulo Guedes, quien la lanzó a modo de advertencia ante las decisiones que viene tomando el presidente
Jair Bolsonaro
.
El funcionario de orientación liberal, quien llegó a amagar con dejar su cargo, no ahorra críticas con la postura del Planalto de seguir endeudándose y aumentando impuestos que pueden ahuyentar inversores.
“Si te equivocas, es rápido llegar a Argentina o Venezuela. Ahora, ¿querés convertirte en Alemania, Estados Unidos? Son necesarios diez, quince años en otra dirección”, agregó.
Guedes, de 71 años, es un ferviente defensor de un programa liberal para la economía brasileña. El ministro quedó debilitado luego de que Bolsonaro relevara días atrás al presidente de la petrolera Petrobras, Roberto Castello Blanco, decisión que derrumbó el valor de las acciones de la compañía.
La medida se basó en la diferencia que sostuvo el mandatario con la política de precios no regulados que propugnaba Castello Blanco, que generó protestas en una parte de la base bolsonarista, los camioneros.
“Si yo tuviera que empujar a Brasil hacia el camino equivocado, prefiero no empujarlo, prefiero salir. ¿Usted prefiere una tasa de interés baja, mucha inversión, empleo, renta, la Bolsa subiendo, todo el mundo ganando, abriendo champagne, un país de prosperidad o ir para Venezuela?”, se preguntó el ministro, quien, no obstante esto, dijo que continuará en el cargo mientras tenga la confianza presidencial.
Guedes también dejó abierta la posibilidad de vender Petrobras, que cotiza en bolsa desde 1999. “Tenemos que dar dividendos para el pueblo brasileño. O se pagan dividendos o se vende”, advirtió.
Desconfianza de los mercados
Las decisiones del Gobierno de subir los impuestos a los bancos y a la industria química y recortar los del diesel y del gas de consumo hogareño inquietan a los inversores.
El dólar se fortaleció el martes cerca de un 2% frente al real, a pesar de que el banco central subastó US$1.000 millones en el mercado al contado.
En tanto, el principal índice de la Bolsa de San Pablo cayó hasta un 2,7% en las operaciones de la mañana, con todas las empresas que lo componen en rojo, excepto una, antes de reducir pérdidas a un 1,3% al mediodía.
Muchos inversores interpretaron el repentino cambio en la política tributaria como una señal de que Bolsonaro le dio la espalda a las promesas de libre mercado de su campaña de 2018, mientras sus números en las encuestas caen antes de la carrera por la reelección del próximo año.
Desconfianza
“Por primera vez, estoy empezando a perder la fe y a sentirme incómodo”, dijo Dan Kawa, analista de TAG Investimentos, en una nota a los clientes. “Espero que se detengan aquí, pero las señales son que el liberalismo económico ha sido dejado de lado y el populismo está ganando terreno en la agenda (política)”.
Las luces de alerta se encendieron con la decisión de Bolsonaro de relevar al presidente de Petrobras. A ellos se sumó la política de quitar incentivos a empresas. “Todo esto genera una incertidumbre institucional”, afirmó Paloma Brum, economista de Toro Investimentos. “En el contexto de una crisis económica, genera incertidumbre sobre si el Gobierno seguirá realmente una agenda liberal”, agregó según consigna el sitio América Economía.
Entre los principales perdedores del martes estuvieron Petrobras y la empresa estatal de energía Eletrobras, que cayeron casi un 5%.
En un comunicado a última hora del lunes, la oficina del presidente anunció sus planes de aumentar el impuesto sobre la renta para las instituciones financieras al 25% desde el 20% del 1 de julio al 31 de diciembre.
Medidas
El gobierno también planea eliminar un régimen fiscal especial para los productores de productos químicos como Braskem SA, cuyas acciones cayeron casi un 4%.
Esas subidas de impuestos compensan parcialmente los decretos de Bolsonaro para llevar a cero los impuestos federales PIS/Cofins sobre el gasoil durante dos meses y el gas de cocina de forma indefinida.
