Un muerto y nueve heridos en un tiroteo en el regreso a clases de la Universidad de Tennessee

Un tiroteo ocurrido este sábado por la tarde cerca del campus de la Universidad de Tennessee, durante los eventos de regreso a clases, dejó un saldo trágico: un muerto y al menos nueve personas heridas. La policía metropolitana de Nashville informó que el incidente se desató alrededor de las 17, cuando dos grupos comenzaron a disparar en medio de una multitud que se había congregado para disfrutar de las festividades.

Don Aaron, vocero de la Policía Metropolitana, explicó que los casquillos encontrados en la escena sugieren que se produjo un intercambio de disparos de un lado a otro de la calle. Según el comandante de la policía, Anthony McClain, los disparos no estaban directamente relacionados con las actividades de la universidad, que incluían un desfile y otras celebraciones, y que el partido de fútbol americano estaba teniendo lugar en otra parte de la ciudad.

“Es una desgracia que unos cuantos tipos lo hayan arruinado para todos”, lamentó McClain. “Tenemos que llegar al punto de parar esta violencia”.

Según comunicó, Associated Press, las autoridades confirmaron la muerte de un hombre de 24 años, mientras que entre los heridos se encontraban dos adolescentes de 12 años y uno de 14, quienes sufrieron lesiones leves. Brooke Reese, vocera de la policía, mencionó que al menos algunos de los heridos parecían estar involucrados en el tiroteo.

La respuesta de la policía y los bomberos fue crucial; algunos de los rescatistas utilizaron cinturones como torniquetes para ayudar a las víctimas. Kendra Loney, del Departamento de Bomberos, destacó la eficiencia en la atención a la emergencia.

El caos que siguió al tiroteo dejó una fuerte impresión en los presentes. Jashawna Rucker, quien estaba en el lugar, relató: “Agradezco no haber perdido la vida ni haber recibido un disparo”, mientras que Rauf Muhammad, que vendía comida en una carpa, describió cómo de la alegría se pasó a la desesperación: “Todos se divertían, la música sonaba y todo. Y de repente, parecía que estábamos en una guerra en algún sitio”.

La policía continúa investigando el incidente e instó a la comunidad a colaborar para poner fin a la violencia que afecta a la ciudad.

Un tiroteo ocurrido este sábado por la tarde cerca del campus de la Universidad de Tennessee, durante los eventos de regreso a clases, dejó un saldo trágico: un muerto y al menos nueve personas heridas. La policía metropolitana de Nashville informó que el incidente se desató alrededor de las 17, cuando dos grupos comenzaron a disparar en medio de una multitud que se había congregado para disfrutar de las festividades.
Don Aaron, vocero de la Policía Metropolitana, explicó que los casquillos encontrados en la escena sugieren que se produjo un intercambio de disparos de un lado a otro de la calle. Según el comandante de la policía, Anthony McClain, los disparos no estaban directamente relacionados con las actividades de la universidad, que incluían un desfile y otras celebraciones, y que el partido de fútbol americano estaba teniendo lugar en otra parte de la ciudad.
“Es una desgracia que unos cuantos tipos lo hayan arruinado para todos”, lamentó McClain. “Tenemos que llegar al punto de parar esta violencia”.
Según comunicó, Associated Press, las autoridades confirmaron la muerte de un hombre de 24 años, mientras que entre los heridos se encontraban dos adolescentes de 12 años y uno de 14, quienes sufrieron lesiones leves. Brooke Reese, vocera de la policía, mencionó que al menos algunos de los heridos parecían estar involucrados en el tiroteo.
La respuesta de la policía y los bomberos fue crucial; algunos de los rescatistas utilizaron cinturones como torniquetes para ayudar a las víctimas. Kendra Loney, del Departamento de Bomberos, destacó la eficiencia en la atención a la emergencia.
El caos que siguió al tiroteo dejó una fuerte impresión en los presentes. Jashawna Rucker, quien estaba en el lugar, relató: “Agradezco no haber perdido la vida ni haber recibido un disparo”, mientras que Rauf Muhammad, que vendía comida en una carpa, describió cómo de la alegría se pasó a la desesperación: “Todos se divertían, la música sonaba y todo. Y de repente, parecía que estábamos en una guerra en algún sitio”.
La policía continúa investigando el incidente e instó a la comunidad a colaborar para poner fin a la violencia que afecta a la ciudad.La Voz

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