Rodríguez Larreta se impuso en la gran interna con los radicales y consolidó su plan presidencial
Horacio Rodríguez Larreta celebró con la victoria que consiguieron sus laderos en la gran interna con los radicales en la Capital Federal y la provincia de Buenos Aires, pero sobre todo se entusiasmó con el significativo triunfo que consiguió Juntos por el Cambio (JpC) a nivel nacional porque potencia sus aspiraciones presidenciales.
Con los números que arrojaron las elecciones Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (Paso), el jefe de Gobierno porteño consolidó su liderazgo en una coalición opositora que demostró haber recuperado atractivo. Quedó en un lugar privilegiado para avanzar con su plan hacia 2023.
Fue la consumación de un primer paso para expandir su alcance territorial y desactivar la resistencia de los radicales. Con María Eugenia Vidal demostró su poderío en la Ciudad, el histórico bastión antiperonista. y con Diego Santilli irrumpió con fuerza en el territorio bonaerense.
Vidal se impuso con más del 68,2% de los votos sobre sus rivales internos, el republicano Ricardo López Murphy (23,4%) y los radicales rebeldes representados por el ex ministro de Salud de Cambiemos Adolfo Rubinstein (8,2%). La ex gobernadora encabezará ahora la boleta a diputados nacionales, que demandará nuevas negociaciones para incluir a los socios derrotados.
“Somos mayoría los que queremos un camino distinto”, desafió Vidal para ponderar la performance que cosechó la coalición opositora en las urnas de todo el país.
Y Santilli, el ex vicejefe de gobierno porteño que se aventuró a la política bonaerense, consiguió su victoria ante Facundo Manes, el neurólogo que se sumó a la carrera electoral y reavivó las esperanzas de los radicales. “El Colo” se quedó con casi el 60% de los votos que obtuvo JpC, mientras que el representante de los boinas blancas cosechó más del 40% en la disputa por encabezar la lista a diputados nacionales.
El resultado puso las cosas en su lugar pero no dañó la unidad. Manes celebró junto a Santilli y prometió: “Todos juntos vamos a ganarle al kirchnerismo en noviembre y en el 2023, pero ya aprendimos que no basta con ganarle, hay que ganarle y transformar la Argentina”.
Es que ambos se convirtieron en protagonistas del batacazo que sufrió el kirchnerismo en Buenos Aires, la provincia que conduce Axel Kicillof. Con el 80,5% de las mesas escrutadas, los números indicaron que JpC se quedó con más del 38% de los votos y rompió con todos los pronósticos al imponerse sobre la boleta del Frente de Todos que encabezó Victoria Tolosa Paz (33,4%).
Rodríguez Larreta apostó y consiguió un capital indiscutible para sentarse a negociar con los pesos pesados de la Unión Cívica Radical, que cuestionaron su prematura carrera presidencial y que buscaron resistir su avanzada interna.
La gran encuesta de las Paso puso sobre la mesa la efectividad de la estrategia que adoptó el mandatario porteño, que demandó negociaciones con la titular del Pro, Patricia Bullrich, para que no afecte el camino de Vidal, y con el intendente de Vicente López, Jorge Macri, para no debilitar a Santilli.
Rodríguez Larreta acompañó personalmente a sus candidatos y se encargó de despegarlos de la figura de Mauricio Macri y de los pecados del gobierno de Cambiemos.