La ONU se mostró preocupada por la “terrible situación humanitaria” de Birmania

Naciones Unidas trasladó al mundo su preocupación por la “terrible situación humanitaria” que vive Birmania a causa del conflicto armado y la inseguridad que asolan el país, tras el golpe militar del 1 de febrero.

Desde aquel momento, se registró el desplazamiento de más de 210.000 personas en varias partes del país. Más de la mitad de ellas abandonaron sus hogares debido a los conflictos y la escalada de violencia en el sureste del país, según manifestó el portavoz adjunto del Secretario General de Naciones Unidas Eri Kaneko en una conferencia de prensa.

“La situación humanitaria se ve agravada por el impacto de las inundaciones repentinas del monzón, que supuestamente han afectado a más de 125.000 personas en todo el país, así como por un aumento continuo de casos de coronavirus, que continúa exacerbando las vulnerabilidades de las personas”, apuntó Kaneko.

Es por esto que tanto Naciones Unidas como los socios humanitarios de esta están trabajando sobre el terreno con el fin de brindar asistencia y servicios de protección para salvar la vida de un total de tres millones de personas, que a día de hoy se están viendo afectadas por los conflictos, la violencia, los peligros naturales y la inseguridad alimentaria.

Sin embargo, la ONU lamentó que todos estos esfuerzos se ven día a día obstaculizados debido a la “inseguridad general, las limitaciones de acceso, incluidos los bloqueos de carreteras, los impedimentos burocráticos y las restricciones relacionadas con el Covid-19”.

Por tanto, Naciones Unidas realizó un llamamiento a todas las partes involucradas en el conflicto para que faciliten el acceso “seguro y sin obstáculos” de los socios humanitarios a todas las personas que lo requieran.

“Los esfuerzos de ayuda de la ONU y los socios humanitarios siempre se guían por los principios de humanidad, neutralidad, imparcialidad e independencia operativa reconocidos internacionalmente”, zanjó Kaneko.