Restricciones en el interior provincial: bien diferente a la cuarentena estricta anterior

En el primer día hábil con restricciones severas, tras cuatro jornadas de feriado, el interior de Córdoba mostró ayer una despareja adhesión al cumplimiento del decreto de la Nación, al que adhirió la Provincia.

En Río Cuarto y Villa María, las dos más grandes ciudades, se observó un acatamiento mayor, al menos en sus zonas céntricas. En el resto, hubo matices, pero en general los gobiernos municipales señalan verse sobrepasados en su capacidad –y, en algunos casos, también en su voluntad– de controlar que los sectores no habilitados efectivamente no registren actividad. En la mayoría de los pueblos y ciudades, se terminó acordado (o tolerando) con sectores comerciales y de obras privadas “no esenciales” que mantengan alguna actividad por fuera del decreto.

Una recorrida

Río Cuarto. Se labraron 120 actas a locales no esenciales abiertos. El caso más llamativo fue el de un templo religioso con gente en su interior al que, por infracción reiterada, el municipio denunciará ante la Justicia.

En el centro, la mayoría de los no esenciales estuvieron cerrados, al igual que los bares que sólo atendían por delivery. En los barrios, el cierre comercial y de servicios era mucho más desparejo.

Villa María. Hubo alto acatamiento, según la entidad empresaria Aerca. El movimiento de ayer en el centro fue escaso, levemente superior al de los feriados de lunes y martes. Durante el “finde” extralargo se labraron 15 actas por infracciones y se clausuró un bar, según el municipio. También se intimaron tres obras privadas en edificios. El rubro gastronómico trabaja a puertas cerradas y con delivery hasta las 23 horas, por un acuerdo con el municipio.

Villa Carlos Paz. El centro, desconocido. Sin gente en días de restricciones. (La Voz)

San Justo. La mayoría de las localidades de ese departamento llevan semanas de restricciones por sus picos de contagios durante abril. Pero esta semana se agudizaron. “La región tomó decisiones conjuntas antes que la Provincia, eso nos ayudó. Restringimos antes las competencias deportivas amateurs, por ejemplo, y las reuniones sociales y culturales”, señaló el intendente de Morteros, José Bria.

En San Francisco, el titular del Centro Empresarial y de Servicios, Darío Tamagnini, avisó que “si se extienden las restricciones el reclamo será más fuerte”. “Con la Municipalidad acordamos que se trabaje de 9 a 19 con el modo take away y delivery, pero sin abrir. Se puede ver que eso se cumple a medias. Las medidas más o menos se van a acatar, pero me parece que vamos a tener que negociar de nuevo si esto se extiende”, anticipó Tamagnini.

Sierras Chicas. Se percibió ayer un funcionamiento “casi normal” en comercios y servicios. En la mayoría de las localidades los no esenciales abrieron sus puertas. Los municipios aseguran que realizan controles, pero la realidad los supera.

En Río Ceballos los locales gastronómicos y demás comercios trabajan hasta las 19. En Salsipuedes los comerciantes acordaron con el municipio abrir hasta las 18 y continuar luego con modalidad delivery.

El intendente de La Calera, Facundo Rufeil, dijo que los comerciantes “piden atender afuera de los comercios” y que analizarán esa medida.

Además, continúan los controles de circulación en los accesos a varias de las ciudades, que tienen una intensa vinculación de tráfico con la Capital provincial.

Punilla. En Carlos Paz fue muy baja la actividad comercial, sumada al parate total del turismo. La Cámara de Turismo local solicitó “imperiosamente a las autoridades que se expidan con un mensaje claro y comuniquen con anticipación las normativas a aplicar después del domingo 30”. Reclaman que no vuelva “la improvisación” de la semana pasada, cuando un día antes se anunció el cierre de toda actividad turística.

En Carlos Paz se vieron ayer muchos comercios no esenciales que decidieron abrir sus puertas, aunque sin público en su interior.

En Capilla del Monte, el intendente Fabricio Díaz, dijo que “sostener las restricciones es muy complejo, por el estado de ánimo”. Allí, a los comerciantes molestos por el cierre se les habilitó una alternativa: “Se les permite el negocio abierto pero sin atención al público, pudiendo vender por teléfono y redes sociales y entregando a domicilio”, dijo Díaz. Algo similar aplican otras ciudades de Punilla.

Río Tercero. En el centro, la mitad de los comercios estaban abiertos ayer, incluyendo a muchos de rubros no esenciales. La mayoría, sin atención en su interior. “Abro hasta que venga alguien a cerrarme, no vinieron a controlar. Pero tampoco vienen clientes”, señaló un comerciante con las puertas abiertas. Durante el “finde” largo se observaron plazas y paseos con gente, muchos sin barbijo. El titular del Centro Comercial e Industrial, Gabriel Prieto, interpretó que “el comercio reclama porque no aguanta más un cierre, sobre todo los gastronómicos”.

Santa Rosa de Calamuchita. El centro, sin turistas y sin vecinos. (La Voz)

Pilar. El movimiento en las calles ayer era prácticamente el habitual. Abrieron casi todos los comercios, incluso los no esenciales. Sin embargo, el intendente Leopoldo Grustrump, dijo que diferentes sectores le exigen más flexibilizaciones. Recién desde las 18 se percibe un importante descenso de la circulación, aunque no total.

Río Segundo. El intendente Darío Chesta reconoció no disponer de la cantidad de inspectores necesarios para controlar que todos cumplan. “Es imposible hacerlos cerrar a todos a las 18. Especialmente en la periferia. Se trata de locales que muchas veces funcionan en el propio domicilio. Algunos comerciantes vuelven a abrir cuando se van los inspectores”, contó.

De todos modos, la circulación baja más decididamente desde las 18.

Calamuchita. Con una mesa bloqueando el ingreso, prácticamente todos los rubros comerciales no esenciales, brindaron ayer atención al público en Santa Rosa, la principal localidad de Calamuchita. A diferencia de los esenciales, que permanecen con sus puertas abiertas, el resto atendió sin permitir el ingreso de clientes al interior. En general, se respeta el horario de cierre total a las 18.

En la vecina Villa General Belgrano se observó, al menos en su centro comercial, un cierre generalizado.

Esa región, con nulo turismo estos días, pierde el eje de su movimiento.