Bioquímicas presas: intentan determinar cuántos damnificados hubo con los PCR truchos y agravarán cargos

Alojadas en la Cárcel de Mujeres e imputadas por supuestas estafas reiteradas y falsificación de documentos privados, continúan detenidas las dos bioquímicas acusadas de haber montado una organización delictiva que engañaba a incautos y a incautas con la realización de tests para la detección de coronavirus, en la ciudad de Córdoba.

Según la causa, las dos jóvenes profesionales, haciéndose pasar supuestamente como trabajadoras de un conocido laboratorio de Villa María, habrían engañado a numerosas personas en la Capital durante 2020. Ofrecían y realizaban exámenes PCR falsos que siempre daban resultado negativo, según la Justicia.

Por ahora, hay cinco damnificados.

El fiscal Gustavo Dalma cree que la cifra de estafados podría trepar a medio centenar, al menos. Es que se determinó que las bioquímicas habrían tenido, al menos, 47 clientes.

Se especula en ámbitos de la causa que, con el paso de los días y del avance de la pesquisa, podrían aparecer más damnificados.

Además de las bioquímicas Silvia Paola Villalón y Paola Andrea Lucero, hay otras tres personas imputadas, aunque por ahora en libertad.

Se trata de Florencia Galetto; su padre, Rodolfo Adrián Galetto; y Javier Lujan Zapata. La joven está acusada por falsificación de documento privado; los dos hombres, por supuestas estafas.

Todo indica que la acusación podría agravarse por la figura de asociación ilícita.

Cómo era la estafa

Las maniobras se habrían cometido durante la segunda mitad de 2020 en Córdoba Capital. Era la época dónde aún la cuarentena impedía las actividades y los viajes, entre otras cuestiones.

Según la causa, las bioquímicas iban a domicilio para realizar exámenes para la detección de Covid.

Las tarifas que se cobraban eran similares a las de centros de salud privados. Había que abonar 6 mil pesos, aunque en algunos casos hubo pacientes que llegaron a pagar 11 mil.

Algunos de los pacientes eran personas que temían estar contagiadas, o bien debían viajar y tenían que gestionar permisos, o bien buscaban certificados médicos para el trabajo.

Las bioquímicas, según la investigación, entregaban los resultados (siempre daban negativo) a las 24 horas. Emitían un certificado con el membrete del laboratorio Gornitz, una firma villamariense que es considerada como damnificada.

Según la fiscalía, los exámenes eran absolutamente falsos.

El papel (que se enviaba por WhatsApp) tenía los teléfonos pixelados o borrados para que no se pudieran leer y así luego llamar.

El servicio de estas bioquímicas, siempre según la pesquisa, se ofrecía de boca en boca.

“Hay que imaginarse aquel momento de pandemia. Las sospechosas ofrecían y realizaban exámenes de Covid a domicilio, con todas las comodidades y la gente caía. Esgrimían trabajar para ese laboratorio de Villa María y entregaban certificados falsos”, comentó una fuente de la causa a La Voz.

“Siempre daban negativo esos resultados de PCR… Y eso es grave. Porque, más allá de la supuesta estafa, había un riesgo extra: quizá el paciente era positivo y le estaban diciendo que era negativo. ¿Y si el paciente era positivo? Es gravísimo. Es muy serio y grave esto que ha pasado”, puntualizó otro informante.

Descubrimiento

Todo se descubrió, según fuentes del caso, dado que un hombre contrató los servicios de las bioquímicas en Córdoba, debido a que su hijo presentaba síntomas de coronavirus.

Los resultados, como era la promesa, estuvieron a las 24 horas.

“El resultado dio negativo, pero el hombre no se conformó, porque su hijo seguía con síntomas. Entonces, le comentó a un médico amigo. Y este le dijo: ¿’Un examen en 24 horas? Es mentira, es trucho. Entonces, se fijaron en el certificado que le habían mandado, pero no podían ver el teléfono del laboratorio, porque estaba borrado adrede”, comentó una fuente de la causa.

Tras buscar en Internet, el hombre encontró el teléfono del laboratorio Gornitz y se comunicó.

Desde el centro de salud de Villa María le informaron que esas bioquímicas no trabajan para ellos y que ese análisis era falso.

Ante la gravedad del descubrimiento, desde el propio laboratorio se efectuó una denuncia a comienzos de año en la Unidad Judicial de Delitos Económicos en Córdoba.

La causa recayó en la fiscalía de Gustavo Dalma, quien se puso de inmediato a investigar.

El expediente viene avanzando y, además de las bioquímicas detenidas, hay otras tres personas imputadas. No se descartan más imputaciones.

El laboratorio Gornitz está fuera de toda sospecha para la Justicia.

Pasos a seguir

La causa avanza con la toma de testimonios y distintas medidas investigativas.

Se esperan las indagatorias a las bioquímicas para esta semana, conforme al avance de la causa,

Todo indica que el número de damnificados se ampliará y se espera un agravamiento de la acusación.

Mientras tanto, no sería una sola la estrategia defensiva de las principales acusadas.

Una de las bioquímicas (Paola Lucero), a través de su abogado Gustavo Franco, podría desligarse de todo y acusar a la compañera, según comentarios vertidos por el profesional a la prensa.