Los 8 ejes que María Eugenia Vidal adelantó en Córdoba para relanzarse en la política

En el cierre de su presentación ante la Fundación Mediterránea, María Eugenia Vidal dejó una frase que generó sonrisas en el auditorio empresarial que participó del almuerzo. Dijo con relación a su libro “Mi camino” que se distribuirá después de Semana Santa.

“Forma parte de la economía familiar. Agradecida si lo pueden comprar”, expresó la exgobernadora de la principal provincia argentina cuyos próximos pasos en la política son seguidos con lupa tanto por las fuerzas que integran Juntos por el Cambio, como por el propio oficialismo peronista en un distrito donde se juega parte del “proyecto”.

Vidal, como ya cronicó La Voz, desgranó en su primera aparición pública, en Córdoba, su paso por la gestión, enumeró en tono intimista lo que consideró sus aciertos y también las acciones que quedaron pendientes. Puso de relieve que el suyo fue el primer gobierno no peronista en 28 años y en manos de una mujer.

Sintetizó la gestión en dos conjuntos de datos: En 2015, cuando llegó a La Plata, la obra pública insumía el 3,7% del gasto total de la provincia. En 2019, al finalizar el mandato, alcanzó 6,1%.

“Cuanto más bajo nos golpean, más arriba nos mantenemos”. Vidal usó una frase de Michelle Obama.

Otro, el déficit fiscal al cierre de la administración de Daniel Scioli era de -1,1% del Producto Bruto Geográfico y cuando se fue bajó a -0,6%, afirmó. Y, finalmente, la carga de ingresos brutos disminuyó de 5,8% a 5%.

Pero todo esto es el pasado. Parte de la historia que, como tal, recibe diferentes interpretaciones. Qué piensa Vidal sobre el futuro y la política, temáticas que están presentes en “Mi Camino”. 

Para responder, dividió su diagnóstico en dos planos. Uno, que incluye cinco puntos, está mezclado con lo que ella misma ejecutó en la Gobernación para realizar reformas “totales o parciales” que todavía hoy sobreviven en la gestión de Axel Kicillof y que sugiere para adelante.

1) Escuchar y dialogar. Puso como ejemplo que para la reforma policial, convocó al diálogo a todos los ministros del área y jefes policiales del período democrático. “No hay que ir con un modelo preconcebido que ratifique lo que yo pienso”, expuso.

2) Sí o sí con los argentinos. La sociedad bonaerense “bancó” la reforma policial. “La primera reacción frente a cambios en la policía siempre es una ola de secuestros extorsivos”, explicó. La ciudadanía soportó la problemática, agregó y cosas como, las declaraciones juradas de patrimonio de los jefes policiales, se mantienen hoy con Kicillof.

3) Liderar la narrativa. “Los hechos tienen un sentido. Detrás de la decisión de cuántas obras hidráulicas se realizaron, estaba la decisión de que la gente no perdiera sus cosas una y otra vez”. “Priorizamos eso y fue lo que comunicamos”, dijo.

4) Hacer un culto al método. “Detrás de cada expediente hay una persona. Cada día que queda dormido un expediente queda alguien esperando”. “Hay que hacer un culto del tablero de control” y realizar un seguimiento de GUN, (en alusión a un término de gestión denominado Gestión de Unidad de Negocios).

5) Levantar la vara. “Aspirar a lo mejor. Después es mucho más difícil volver atrás”, indicó.

Luego, María Eugenia Vidal describió tres “claves” para encarar las reformas pendientes en el país a fin de apuntar a una recuperación socioeconómica.

6) Dejar de discutir a Alberdi. “Dejar de discutir lo obvio de cualquier republica de democracia occidental representativa. Por 10 o 20 años no discutamos ni la Constitución, ni la Corte ni el Poder Judicial”. Esto no implica desconocer que las tres instituciones “tienen cosas que hay que cambiar” pero “si estamos todo el tiempo discutiéndolo no hay sostenibilidad de ninguna de las otras reformas posibles”.

“Es cierto que la fortaleza institucional no te da de comer, pero sin la fortaleza institucional no hay verdadera libertad y sin libertad no hay progreso”, agregó. Y cerró este punto: “Dejemos de discutir por un tiempo el mapa institucional de la Argentina”.

7) Definir un modelo económico sustentable. “Hoy tenemos el PBI del ‘75. Con 47 años, una persona de mi edad vivió el 40% de su vida en recesión. Una cada tres años”. “Hemos ido pendulando –graficó Vidal– entre modelos que aumentan el gasto público, atrasan el tipo de cambio y mejoran el salario real para resolver conflictos sociales. Y el modelo que ajusta el gasto, vuelve más competitivo el tipo de cambio y atrasa el salario. Ninguno de los dos ha sido sostenible”. “Damos discusiones que el resto del mundo no da, entre la emisión y la deuda para sostener un déficit fiscal permanente. O si lo importante es la inversión o es el consumo”. En esa línea planteó la necesidad de “construir un modelo que ofrezca futuro y en el presente incluya a los que no pueden esperar”.

8) Redefinir prioridades y ordenar un estado donde todos hacen todo. “Es difícil decidir donde uno no va a poner los recursos. Es un país potencialmente rico, pero hoy no somos ricos”. “Este no es desafío técnico, de los economistas, sino político”. “Todos hacemos todo. La Nación, las provincias, los municipios, tienen seguridad. Todos construimos caminos rurales. Cuando todos hacemos todo nadie es responsable de nada”, enfatizó.

En varios pasajes de su mensaje, aludió a las “chicanas” que suelen dispararle desde el oficialismo aun cuando siguen adelante obras iniciadas en su gestión, como fue el caso de las obras sobre el río Luján. 

“Era candidata con botas en un charco”, le dijo Alberto Fernández. “Más allá de la chicana, que no vale la pena contestar, estaban continuando una obra que iniciamos nosotros en el marco de una reforma estructural”, replicó Vidal.

Por eso, para cerrar su presentación, apeló a una frase de Michelle Obama: “Cuanto más bajo nos golpean, más arriba nos mantenemos”. 

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Los 8 ejes que María Eugenia Vidal adelantó en Córdoba para relanzarse en la política (Foto: Pedro Castillo).
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